Una pequeña idea para ahorrar CO2 se convirtió en una gran historia.
Estas bolsas estaban hechas de botellas de plástico PET.
Las modernas tecnologías de reciclaje pueden transformar estas botellas en un tejido duradero.
Esto da como resultado aproximadamente un 50% menos de contaminación por CO2 y un 50% menos de recursos energéticos y una mayor protección del medio ambiente.